Advertencia de tu poeta maldito

Lo que me da seguridad al pasar los años

es que siempre serás tan mía como yo tuyo

No importa que hagas todo por olvidarme

ni que intentes huir junto a tus sueños

Estamosunidoshastaquevolvamosanacer

No me preocupa

que busques otros brazos para tus noches

que beses otros labios faltos de pasión

que dejes a otras manos acariciarte

Nadie tiene tan memorizado tus secretos:

La tranquilidad con la que duermes a mi lado

Tu aliento en las madrugadas más frías

Esa estría que nadie encontrará para amarla

A lo mejor no soy el príncipe azul que sueñas

pero sí soy el hombre más humano que te ama

porque amar no sólo se trata de promesas

ni de sueños de cuentos de hadas

Amar se trata de arrancarte la piel para cubrirte del frío

Morir todas las noches para besarte por las mañanas

Sacarte de quicio todos los días para abrazarte

Amar es uno de esos sentimientos raros

con los que te cuelgas de los cuernos de la luna

sin saber cómo es que llegaste hasta ahí

Es uno de esos sentimientos extraños

que no entiendo aún pero me vuelve grande sentirlo contigo

En este momento no entiendes cómo es que se amar

y presiento que nunca podrás perdonarme por no saberlo

pero me atrevo a confesarte de lo que soy capaz

: Un niño buscando su infancia detrás de peter pan

Un adolescente que siempre quiere ese primer beso

Un hombre que se descubre con cada lágrima

Me gustas por ser la mujer que eres

El némesis que cualquier poeta requiere para aterrizar

para darse cuenta que se vive en la tierra

no solamente en el aire

Me gustas con una rabia imperfecta casi dolorosa

No es recomendable tratar de entender

casi siempre uno piensa las cosas cuando es cuestión de sentir

como te siento a ti por las madrugadas

cuando vuelo sin rumbo

frío angustiado por no encontrar el camino correcto

Aquel camino de sueños impostergables

de soledades inmaculadas que me atrapan por sorpresa

Apuesto mis versos a que jamás nadie podrá amarte como lo hago yo

Por esta razón es que te advierto

que más allá de reclamos o culpas o reproches

jamás dejarás de ser la tinta que escurre por mis ojos